¿Ponerle puertas al campo?
Las cancelas de hierro y las verjas de hierro son las que nos encontraremos delimitando estas zonas, sirven pues para separar, cerrar, proteger, o aislar diferentes espacios. También como adorno o seguridad.
¿Ponerle puertas al campo?
Esta expresión se utiliza para demostrar que hay cosas a las que no se les puede poner límites, el campo es un buen ejemplo de libertad, pensamiento y creatividad a la que nunca se le pueden poner puertas. Esto claro en sentido figurado porque el monte está lleno también de puertas que delimitan propiedades privadas y zonas acotadas.
El bronce fue utilizado por las primeras civilizaciones como material para cerramiento en sus construcciones, los romanos también en prisiones, circos y teatros. En Sevilla encontramos el anfiteatro de Itálica que es considerada la reja más antigua conservada.
Más tarde también esta industria del hierro tuvo como clientes a abadías y catedrales como protección de sus templos y de los tesoros que en ellos se mostraban. Igualmente las Iglesias románicas cerraban el Altar Mayor con rejas de hierro.
Con el gótico la rejería alcanza todo su esplendor cerrando las capillas y los coros con las rejas de hierro, que luego en el Plateresco se irían recargando sus motivos, y para preservarlas de la herrumbre recurrirían al plateado y dorado, una catedral digna de visitarse es la catedral de Sigüenza.
Las cancelas y rejas son muy habituales en Andalucía, labradas en hierro delimitan un edificio o una casa. Normalmente suelen ser labradas con motivos florales y que una vez en desuso adquieren un importante valor en el mercado de segunda mano. Puertas que en su día fueron protagonistas de amores y rencillas y que hoy son punto de mirada para muchos coleccionistas o personas a las que les gusta lo antiguo.
Las ventanas andaluzas también son lucidoras de verjas de hierro que durante siglos pasados fueron testigos de amores imposibles y que durante el Siglo de Oro se tuvo tan en cuenta en la literatura.
Incluso más tarde en su libro de poemas “Soledades” Antonio Machado hace referencia en varios poemas a las cancelas, así en “Fue una clara tarde, triste y soñolienta”
“Rechinó en la vieja cancela mi llave;
Con agrio ruido abriose la puerta
De hierro mohoso, y, al cerrarse grave
Golpeó el silencio de la tarde muerta”.
En “Hacia tierra baja” expresa:
“Rejas de hierro: rosas de grana.
¿A quién esperas,
Con esos ojos y esas ojeras?
Enjauladita como las fieras,
Tras de los hierros de tu ventana?
Hoy día hay empresas dedicadas a la fabricación de cancelas y verjas de hierro como Ferroforma en Valencia con una amplia experiencia en el sector desde donde pueden realizar pedidos a medida.
Las cancelas y verjas de hierro es una de sus secciones que vienen ofreciendo desde hace años a particulares, Comunidades y arquitectos y constructores.